Como esto es un blog y no un periódico, escribo esto consciente de que ahora mismo hay cientos de cosas que pueden robar nuestra atención y que la necesitan. Me daré el permiso de compartir algo que no está en las primeras páginas pero que llamó mi atención de una manera especial recientemente. El rol que jugamos en un evento influye mucho lo que podemos extraer de la experiencia. Desde mi rol observador pude analizar a los presentes. En una ocasión, las personas tenían la oportunidad de expresar sus dudas o aportar algo a raíz de lo que se había expuesto. De un grupo de 15 personas solo dos levantaron la mano sin mucho titubeo, dos mujeres, una venezolana y otra cubana. Desde siempre hemos reconocido el talento extranjero, pero hay algo que ellos aquí en República Dominicana tienen que nosotros no, y es el motor que te impulsa a crecer en un país que no te vio nacer y lo que te acompaña es tu disposición a crecer, usualmente no es el apellido, las relaciones o las conexiones. Nosotros podemos tener la ciudadanía, pero eso no necesariamente viene acompañado de un impulso de echa’ pa’lante. Mudarse de país usualmente tiene razones de peso. Ese peso se lo da nuestra propia escala de prioridades y las oportunidades que nosotros veamos en otra tierra que no sea la nuestra. Sea que tu proceso sea calculado o acelerado por diversas circunstancias, no es una caminata al parque. Es dejar lo que conoces, por lo que vas a conocer, es dejar el camino por otro que esperas que nunca se convierta en vereda. No puedo generalizar, siempre hay excepciones a la regla, pero quisiera puntualizar algunos aspectos que he visto en los inmigrantes que los ciudadanos pueden emular.
1. El temor a lo desconocido genera una parálisis, los inmigrantes se vuelcan en lo desconocido, utilizan el temor a su favor y su flexibilidad de experimentar cosas nuevas aumenta.
2. Cada día rompen una barrera, puede ser el idioma, la cultura, el transporte, los procesos, cada día pueden decir sin titubear, “hoy se algo que ayer no sabía, y lo haré mejor para la próxima”.
3. Sienten la necesidad de desarrollar relaciones, al verse con ninguna, pueden apreciar cada persona que se agrega a su lista de conocidos. El conocido de hoy se convierte en parte de su comunidad y puede terminar siendo su familia lejos de casa.
4. Atesoran los pequeños detalles de vivir en su país, su casa, su comida, sus amigos de la infancia, la gente, el lenguaje o jerga popular.
5. Se convierten en embajadores de su país y le sacan partido a esto. Los extranjeros que conozco son una marca país andante. Los venezolanos me han invitado a comerme las mejores cachapas del mundo, los italianos me han invitado a su exquisito ristorante, los españoles con su seseo me hablan de las tapas, de la industria hotelera y de su asombroso clima. ¿Y yo? Cuando vivía en Inglaterra, tenía un discurso encantador, todavía lo tengo, sobre como RD lo tiene todo, playas, montañas, comida, música.
6. Se les hace fácil contar las gracias del país donde están, sea el sistema educativo, la salud, la libertad, la seguridad, lo que los ciudadanos no ven, lo pueden ver con lentes amplificadores, aprovechan las oportunidades mejor que cualquier otro, especialmente si en su país natal tener lo que otros desechan es un sueño, quizás para muchos de ellos en algún momento inalcanzable.
Sea que estemos en la tierra que nos vio nacer o a millas y millas de ella, abracemos los cambios como oportunidades de crecimiento. No seamos de los ciudadanos que dicen, “es que vienen a quitarnos trabajo”, lo que nos quita el trabajo y por lo que claramente estaríamos en desventaja es si tenemos menos orientación al servicio, menos preparación, menos experiencia y más temor de hacer algo inusual para conseguir ese trabajo que anhelamos. La desventaja nuestra frente a un extranjero es tener una visión periférica muy limitada que no nos permita ver las oportunidades donde otros la ven en color neón. Nuestra desventaja frente a un extranjero es que nos vengan a dar cátedra de nuestra propia historia, es vivir una ciudadanía cómoda, de bajo impacto. ¿Y esto es solo evidente aquí? Por supuesto que no, ¿qué me dice esto? Que la raíz está más cerca de lo que pensamos y que desde ahí podemos trabajar y transformar muchas cosas. Dejo esto en tu mente creativa y capaz, ¿Cuál crees tú que es la raíz de todo esto? Me encantaría saber lo que piensas.
Gloria a Dios por todo.
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